Por: Pablo Castañeda
En los días corrientes se han dado muestras de creciente preocupación de la gente ante el aumento del precio de los productos básicos de consumo debido al fenómeno conocido como inflación y es que en la economía actual los precios de los bienes y servicios suelen estar en constante actualización: ya sea que disminuyan un poco, aunque la tendencia es el incremento siendo inalcanzables para la mayoría de las familias.
Como principales causas puede ser cuando la demanda es superior a la oferta, o cuando el aumento de los costes de la producción de un bien o servicio suben, por ejemplo: la elevación del costo de la materia prima, de la mano de obra o de los impuestos, pero la inflación también se manifiesta cuando la base monetaria es demasiada, lo que significa que hay más dinero en circulación para gastar, sin embargo esto mismo hace que la demanda no sea asumible y por lo tanto se da lugar al aumento del precio de los productos.
La inflación en México volvió a acelerarse en junio alcanzando el 7.99% siendo este su nivel más alto en 21 años de acuerdo con datos del INEGI. Los alimentos presentaron una variación anual de 14.43 por ciento en junio de 2022, continuando con su trayectoria al alza. Un 38.8 por ciento de la población en México se encuentra en pobreza laboral y en Zacatecas es casi la mitad de sus habitantes con ingresos inferiores al costo de la canasta básica teniendo un salario de entre mil 600 a 2 mil pesos a la semana.
Así la entidad está ubicándose entre los estados en donde más ha pegado la alza de los costos en los productos, sin embargo todo se viene agravar ya que es de los estados en donde existe más pobreza laboral, entonces vemos que los abarrotes han incrementado el precio en 31% en lo que va del año, pasando de 1255.14 pesos el costo de la canasta básica en enero del 2022 a 1648.93 pesos en junio.
Algunos productos en los que se ha visto un incremento más pronunciado y que son indispensables son: la pechuga de pollo que se vende en $150 el kilo, es decir 10 pesos más que en mayo; la tortilla de maíz comprada en un promedio de $17 en municipios como Guadalupe y Zacatecas, aunque se ha detectado que en algunos otros alcanza hasta $19 por kilo equivaliendo un peso más al mes de mayo; pero las cosas no terminan, se estima que alcance los $22 al término del año, mientras que el aceite que en enero costaba $43, en junio ha llegado a $50 por litro, a ello se sumaría, aunque no es el tema algunos otros costos como el agua, luz, teléfono-internet, educación y salud provocando incertidumbre y problemas inmediatos a las familias demostrando que con la escasez de dinero llevan niveles muy por debajo de lo apropiado para vivir como se debería, sin lujos, pero sin tanta necesidad.
Y la situación ha provocado que cada vez más personas opten por dejar de consumir productos de los que se puede prescindir como aguacate, papas o bien reduciendo la cantidad del kilo a sus fracciones para hacer rendir el mandado por parte de las encargadas del hogar; otro de los que incrementó el precio fue el pan que se encontraba en 6 pesos pasando hace poco a los nueve, así la inflación pega tanto consumidores como comerciantes que se han visto afectados con los costos que van a la alza.
Dado que la pobreza en el estado es grande y desde luego que la inflación la pagarán los pobres porque aunque el gobierno de la 4t haya iniciado algunas medidas de contención, estas han tenido poco impacto ante las variables macroeconómicas, por tanto es que se confía en que la gente resuelva todo con el dinero de los programas sociales, a la vez que son usados políticamente para compra de votos, no habiendo otra alternativa más que ajustarse el cinturón, como siempre lo han hecho los pobres.
En este escenario también resulta útil la organización del pueblo de México para que siendo mayoría exija un aumento real del salario a sus patrones, pero también que las secretarías encargadas de la salud y del consumo hagan algo en favor de la economía doméstica y no solo se dediquen a poner pequeñas multas económicas o inmovilizar aparatos de medida como básculas, porque eso es solo una vacilada a la inteligencia colectiva.